Bien: VALLE DE CUELGAMUROS

Código de identificación:
MADR-1
Fecha declaración:
21 de octubre de 2022
Fecha incoación:
Comunidad autónoma :
Comunidad de Madrid
Provincia:
Madrid
Localidad:
San Lorenzo de El Escorial
Administración que procedió a la declaración:
Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática
Ubicación: Lat: 40.6418018, Long: -4.1551208
Identificación:
El Valle de Cuelgamuros, antes denominado Valle de los Caídos, es el principal monumento del franquismo. Fue concebido por el dictador Francisco Franco para celebrar su victoria militar y dar cobijo a los cuerpos de sus partidarios en la guerra (1936-1939) que se desencadenó tras el golpe de estado de parte del ejército contra la Segunda República el 18 de julio de 1936. Tardó en torno a diecinueve años en construirse y para ello, se usó en buena parte mano de obra penada. Lo inauguró el dictador el 1 de abril de 1959, en el vigésimo aniversario de su victoria en la guerra. Desde el principio, fue un monumento concebido solo para los vencedores.
A partir de 1959, empezaron a llegar a las criptas de la Basílica excavada en la roca más de 33.000 cuerpos de personas fallecidas en la contienda, un número indeterminado de ellos sin el consentimiento previo de sus familiares. Uno de los primeros cuerpos fue el de José Antonio Primo de Rivera, fundador del principal partido fascista español, Falange Española, que había sido ejecutado en 1936 en la cárcel de Alicante y trasladado a la basílica del Monasterio de El Escorial a finales de 1939. En 1975, el propio Francisco Franco fue enterrado allí, tres días después de su muerte.
Durante varias décadas -antes y después del sepelio-, el Valle fue un referente clave primero para los partidarios del dictador y, tras su muerte y el proceso de democratización, para los nostálgicos del régimen, como se expresaba en las celebraciones del 20 de noviembre, aniversario del fallecimiento de José Antonio y Franco, los dos personajes históricos que presidían la jerarquía funeraria del recinto en el altar mayor de la basílica. Desde el año 2000, en conexión con el nacimiento de una nueva cultura memorialista en España -vinculada a los paradigmas transnacionales de los derechos humanos-, el cuestionamiento del statu quo del monumento por una parte de la sociedad española se hizo más acusado. En el marco de este nuevo enfoque, y a raíz de la aprobación de la Ley de Memoria Histórica (Ley 52/2007, de 26 de diciembre) y del Real Decreto-ley 10/2018 de agosto que la modificó puntualmente, el Gobierno impulsó la exhumación del Dictador el 24 de octubre de 2019.
El descubrimiento de la presencia en sus criptas de civiles republicanos ejecutados por las fuerzas franquistas, trasladados desde fosas comunes sin permiso ni conocimiento de sus familiares, así como de soldados de la República, junto con la continuidad de algunos acontecimientos memoriales conectados con la dictadura y la ausencia de una resignificación sistemática en el monumento, le ha convertido en el reducto más polémico de la memoria del franquismo.
Al amparo de la nueva Ley de Memoria Democrática, El Valle está considerado un cementerio civil que interpela a todas las víctimas de la guerra y la represión en un marco de derechos humanos.
El Valle de Cuelgamuros es una parcela de gran dimensión en el interior de la cual, además de la basílica ya citada, se localiza una gran cruz construida sobre el cerro de la Nava, una abadía, diversas construcciones para la explotación del monumento, así como restos arqueológicos de los destacamentos penales y campamentos de trabajadores implicados en la construcción del complejo.
Información:
Se inscribe este bien en aplicación del artículo 54.1 de la Ley 20/2022, de 19 de octubre, de Memoria Democrática